Tag: devoción

La Candelaria

El día 2 de febrero es una fecha muy importante en la localidad pacense de Torre de Miguel Sesmero, ya que se celebra la Festividad de la Virgen de la Candelaria.

A pesar de ello, esta fiesta en Honor a su Patrona, también se celebra el día 1 de febrero, optando así a una programación más amplia y haciéndole un buen homenaje a esta advocación de la Virgen María.

Previamente a estos días, los torreños se van de ruta al campo y recolectan “ramoneros” y ramas de encina que acaban colocando tanto en la fachada de la Iglesia Parroquial, engalanándola para la fiesta, como también en la puerta de la misma para su posterior quema.

Con todo preparado, el día 1 de febrero tiene lugar el rezo del Rosario y tras él, se celebra la Eucaristía y el ejercicio de la novena, en el que se le pide a la Virgen por algo en concreto.

Esta ceremonia cristiana es distinta a la de cualquier día convencional ya que es amenizada con el coro, quien canta algunas canciones a la Virgen de la Candelaria como la de “Virgen Bella”.

 Finalizando la celebración religiosa, salen todos los vecinos a la puerta de la Iglesia y se encienden las candelas en homenaje a la Virgen y su etimología, pues hace referencia a la luz santa que guía hacia el buen camino, aportando libertad y mayor fe en Dios.

En la mañana del día 2 de febrero, se celebra la Santa Misa dedicada a la Patrona en la cual se lleva a cabo la tradicional presentación de los niños bautizados en el último año a Nuestra Señora de la Candelaria. Tras este acto tan especial, los vecinos del pueblo sacan en Procesión a la Virgen en la que recorren varias calles de la localidad. Además, el paso de la Virgen va acompañado de alguna Banda de Música de algún pueblo aledaño, como suele ser la de Barcarrota.

Algo muy peculiar que tiene esta festividad es que, tras la procesión, se hace el sorteo entre los vecinos allí presentes para que la persona afortunada entre a la Iglesia al niño que lleva la Virgen.

Para poner fin a estos dos días festivos, el Ayuntamiento de Torre de Miguel Sesmero organiza una gran verbena amenizada por una orquesta.

Foto Antigua de La Candelaria. Fotografía de Torre de Miguel Sesmero Televisión.

Cartel de la Feria en Honor a Nuestra Señora de la Candelaria (Torre de Miguel Sesmero, 2018)

Fuentes:

 

San Mauro Abad

Una de las fiestas más importantes de Almendral es la celebrada el 15 de enero en homenaje a su patrón, San Mauro Abad. Su origen data en 1501, cuando el obispo Don Alonso Manrique mandó que fuera una fiesta de guardar para todos los almendralenses, debido a la gran devoción que tenía el Santo por parte de mucha gente del pueblo.

Antiguamente, en el siglo XVIII, se realizaba una misa cantada el día 15 de enero, había fuegos artificiales y otros actos de regocijo y júbilo. Todos estos festejos eras pagados por el mayordomo de la Cofradía. Depende de quién fuera cada año, en ocasiones contrataban funciones de comedia y a la Capilla de Música de la Iglesia Colegial de Zafra.

Actualmente, para su conmemoración, desde el día 12 de enero hasta el 14 se realiza un triduo. Pasados esos tres días de celebraciones y rezos en honor al patrón de Almendral, el día 15 de enero se hace un desayuno popular del que disfrutan muchos vecinos y después se realiza una misa en la Iglesia Parroquial Santa María Magdalena.

Además, también se recibe la visita de dos obispos diocesanos para seguir la tradición de venerar las reliquias de San Mauro que se encuentran en el arca bajo dos fechaduras, cuyas llaves están en manos del párroco y el mayordomo de la Hermandad de San Mauro.

Esta tradición se había perdido debido a la guerra con Portugal que comenzó en 1640, por lo que, por motivos de seguridad, estas fueron trasladadas a la Catedral de Badajoz por parte del Obispo benedictino de Badajoz D. Fray José de la Zerda en el año 1643. Allí aún se conservan algunas, aunque tras firmar la paz, la mayoría fueron devueltas a la parroquia donde se encuentra la tumba con los restos del Santo, que descansan allí desde el 29 de abril de 1668, tras la orden que se dio el día 8 del mismo mes para que eso sucediera.

El día de San Mauro de Abad, además de lo anteriormente citado, también se celebra una procesión en la que se saca la imagen del patrón por las calles de Almendral, acompañada del sacerdote que camina detrás de sus pasos con una de las reliquias entre sus manos y, por supuesto, de los vecinos que le tiran caramelos.

Debido a esto último, los más pequeños también participan en esta fiesta y su afán es recoger todos los caramelos posibles tal y como hacen en fechas navideñas durante la cabalgata de los Reyes Magos. Esta tradición, tiene su origen en los años 40/50, cuando durante esta festividad había muchos puestos de caramelos en venta y cuando el Santo pasaba en procesión, se los tiraban. Actualmente, son los propios vecinos quienes los reparten con una simbología para ellos: por cada puñado de caramelos que se lanza, se pide un deseo.

Una vez finalizados los actos religiosos, la Hermandad del Señor de la Urna lleva a cabo la rifa de un cerdo en la puerta del Ayuntamiento. Este acto es una de las tradiciones más antiguas del pueblo, pues se realiza desde 1882.

Para finalizar el día por todo lo alto, el Ayuntamiento organiza una verbena popular en la que además de escuchar y bailar las mejores canciones, también se podrá disfrutar de la degustación de la matanza que también se lleva a cabo.

San Mauro de Abad, Patrón de Almendral. Fotografía del Ayuntamiento de Almendral.

Fuentes: