Poesías

Badajoz es una ciudad en la que, desde siempre, ha existido un buen número de escritores ligados a la misma, ya sea por nacimiento o por cualquier otra causa. Esto ha dado como resultado una gran riqueza literaria. A continuación se recopilarán algunas de las poesías escritas por dichos autores que tengan relación con la ciudad de Badajoz.

AMANECER EN BADAJOZ (Jesús Delgado Valhondo)

Siento la luz latiendo debajo de mis párpados,
viene del manantío que brota de mi alma,
del amor a la vida abrazando mi cuerpo,
del corazón subiendo la escalera soñada.

Abro los ojos, nada: la luz es más profunda.
El muro de la sombra a mis manos agranda.
Voy buscando el milagro que presiento en noticias
de un nuevo sol vertiendo su dorada palabra.

Ya respiran los árboles en la luz de los pájaros,
en donde está la estrella dulcemente cansada,
en donde está el recuerdo llamando a todas partes:
catedral, río, puente, torre de la Alcazaba.

Resplandece en la sangre la claridad del día.
Ha despertado el aire remansos de nostalgias.
Solamente dos pasos, alargar los sentidos,
descubrir tras la noche Badajoz en el alba.

Huele el paisaje a limpio, tierra y cielo limpio,
el silencio se rompe en trozos de mañana
Dios me mira contento desde sus grandes horas
en el momento justo de abrir yo mi ventana.

BADAJOZ (Manuel Monterrey)

Vieja ciudad vigilada
por el alminar moruno
y la alta torre cristiana.

Tus cuatro puertas al campo
y tu puente sobre el río
eternamente peinándolo.

Verde paisaje rodea
tu recinto amurallado
cubriéndote de belleza.

Tu pasado poderío
aún recuerdan las almenas
que se miran en el río.

¡Campo de la Cruz gitano!
pórtico de la ciudad,
lonja de ventas y tratos.

Y tus breves calles pinas,
estrechas y tortuosas
por donde el tedio camina.

¡Que en la vieja alcazaba,
en la torre de los moros
tienes cautiva tu alma!

Fuente:

  • Delgado Valhondo, Jesús (1961). Aurora. Amor. Domingo, en Primera Antología. Badajoz, Diputación Provincial. Pp. 115-154.
  • Monterrey, Manuel. Estampas de Badajoz. 1900.